1. Rompe con lo establecido
El primer paso que debes dar es romper con lo normal y salir de tu zona de confort. Si haces siempre lo mismo día tras día, tu mente no se ejercitará.
Huye de la monotonía, vive experiencias nuevas (cambia de trabajo, viaja, practica un deporte de riesgo), sé dinámico y adapta tu personalidad a un estilo activo y receptivo.
2. Toma notas en cualquier lugar
Las personas más creativas siempre llevan en su bolsillo una libreta y un bolígrafo para sacarlo en cualquier momento y tomar apuntes, hacer bocetos, diagramas, de todo lo que le parezca interesante.
3. Ten una vida sana
Para tener un cerebro sano es importante comer sano, hacer deporte y dormir bien. En el momento que alguno de estos falle, nuestra capacidad creativa puede verse afectada y nos impedirá pensar con claridad.
4. Sé curioso/a
Preocuparnos por cosas distintas a nuestros intereses puede permitirnos descubrir nuevas habilidades que nos complementan como personas y que nos hacen únicos.
5. Haz ejercicios de proyección
Con todas las ideas que se te cruzan en la cabeza, intenta cuestionarte qué pasaría si llevaras a cabo cada una de ellas, de forma independiente.
No importa que la idea no se haya pensado mucho y que no esté bien definida, sino de lo que se trata es de hacer hipótesis y dejar volar nuestra imaginación. ¿Crees que las ideas más brillantes de Einstein fueron muy estudiadas por el científico? La mayoría de las ideas de los grandes creativos surgieron de pensamientos poco habituales (y de un punto de locura, todo hay que decirlo).
6. Aplica la técnica Scamper
El método Scamper (sustituir, combinar, adaptar, modificar, poner en otros usos, eliminar y reformar) resulta muy útil cuando estamos saturados y no se nos ocurren más ideas.
Se trata de formular preguntas relacionadas con cada una de las acciones anteriores, por ejemplo: “¿qué deseo sustituir?, ¿qué pasará si combino esta idea con otra?, ¿qué otra idea podría adaptar?, ¿qué puede añadirse o modificarse?, ¿para qué más podría usarse?, ¿qué sobra?, ¿qué arreglo puede hacerse o qué orden podría mejorar?”
Lo ideal es apuntar todas las ideas que vayan surgiendo y hacerlo de forma constante, verás cómo obtienes buenos resultados.
7. Ten un espacio de relajación
Por regla general, estar en un lugar con mucho ruido y sentirse estresado puede afectar a la concentración y, por tanto, a la creatividad. Por eso, te recomiendo que estés en un sitio relajado, donde puedas encontrar tu paz interior y puedas tranquilamente pensar y plasmar tus ideas. De no ser así, solo te centrarás en aquello que te preocupa, bloqueando otros pensamientos que te enriquecen.